Se llaman así a los que han nacido entre 1980 y 1990, también conocidos como generación Y, y que han surgido como continuación de la generación X, los millenials se caracterizan por ser gente que se adapta con mucha facilidad a los cambios y en particular por estar al día en el uso de las nuevas tecnologías, con una necesidad de estar ‘hiper-conectados’ y que buscan la inmediatez en su día a día.
Como generación que son, constituyen un motor económico ya que se empiezan a incorporar al mundo laboral y por lo tanto empiezan a tener unas necesidades como por ejemplo puede ser la emancipación, que conllevaría el hecho de buscar una forma de vivir independiente.
Si bien es cierto que los millennials han crecido en época de crisis, resulta complicado que este sector pueda acceder a grandes inversiones, el hecho de que los sueldos sean bajos tampoco permite mucha capacidad de ahorro, con lo que no pueden plantearse comprar una vivienda a medio plazo. Así que un gran número de jóvenes opta más por el alquiler que por la compra de una casa.
Para esta generación, el alquiler supone menos riesgo que comprar una propiedad, ya que por un lado les permite la independencia y por otro el poder moverse. El mercado laboral es muy cambiante y además estos jóvenes no apuestan por el trabajo fijo, sino que tienen inquietudes, con lo que estar de alquiler, permite que en cualquier momento puedas cambiar de residencia para encontrar un trabajo mejor. Con respecto a la ubicación, suelen preferir vivir en el centro, eso les permite llevar una vida activa sin necesidad de coger el coche para ir a cualquier sitio.
Con este panorama, el sector inmobiliario tiene que reinventarse de manera que pueda dar respuesta a un sector de la sociedad muy importante, que apuesta por casas tecnológicas y viviendas eficientes.