¿Tienes una habitación libre? Sácale partido

Uno de los requisitos que tu casa tenía que cumplir es que fuera lo suficientemente espaciosa. Esto condicionó la búsqueda que realizaste en su momento y te condujo a seleccionar una vivienda que sabías de sobras que cubría todas tus necesidades. Es más, pasado un tiempo, has observado como una de las habitaciones ha quedado prácticamente olvidada y solo la utilizas para almacenar todo aquello que no quieres que esté a la vista.

Desde Fincador, consideramos que estás cayendo en un gran error. Tienes un espacio con un gran potencial que utilizas como trastero. Bajo nuestro punto de vista, podrías darle un giro a la situación y rentarlo. De este modo conseguirás un suplemento económico que seguro que puedes destinar para sufragar algunos de tus gastos.

La población ideal a la que puedes dirigir este tipo de alquileres es la formada por trabajadores desplazados a la ciudad o estudiantes. Generalmente, la relación contractual durará unos meses. Por lo que puedes probar la experiencia y decidir si continúas rentando tu habitación o le das otra utilidad.

Si te preocupa tener que hacer una gran inversión para equiparla, puedes estar tranquilo. Este tipo de espacios debe contar con las comodidades y prestaciones básicas, dejando margen a que la persona que lo ocupe pueda darle su toque personal. Por tanto, te recomendamos que incluyas una cama, una mesilla de noche, un armario, un sillón, una estantería o unas baldas y unas lámparas. De manera opcional puedes incluir una mesa, por si requiere hacer una gestión o colocar su ordenador personal.

En cuanto al estilo decorativo, lo ideal es que te decantes por tonos neutros, dado que resultarán más atractivos para la mayoría de las personas que acudan a tu hogar. Por ello, pintar la estancia de tonos blancos o beige es una apuesta segura.

En cuanto a la decoración, como te indicábamos anteriormente, no te excedas. Bajo nuestro punto de vista, puedes colocar algún elemento que le aporte calidez a la estancia, tales como unos cojines o una alfombra. No lo recargues y permite que puedan incluir objetos personales que le haga sentir como en casa.

 

 

Autor: Fincador – equipo de redacción

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